Seguro que más de una vez os ha pasado eso de desear algo, tener un proyecto a punto de salir pero aún sin concretar y no querer expresarlo en voz alta para no gafarlo.
Eso es algo que me pasa a menudo, pero esta vez me voy a arriesgar. Voy a contaros algo que Jose y yo queremos que salga, estamos trabajando en ello y a la espera de respuestas, pero lo vamos a compartir con vosotros porque creemos que nos podéis enviar energías positivas con los hilos de vuestro pensamiento; que para los bosquimanos residen en la garganta... algo muy adecuado cuando se trata de contar historias...
La semana pasada estuvimos en Gugulethu. Es una township cerca de Ciudad del Cabo. Se inauguraba una biblioteca y nuestra amiga Tanya conocía a las personas que impulsan el proyecto.
La biblioteca no es muy grande, pero es muy muy bonita. Nace con la ilusión de crear un espacio para la lectura y el juego, un lugar donde crear y compartir historias.
Es un barrio pobre, donde la mayoría de la población es xhosa. No disponen de muchos recursos materiales, pero os podemos asegurar que les sobran ganas y energías para soñar con un futuro mejor basado en la educación.
Hablamos con las personas involucradas en la biblioteca y pensamos que podríamos contar cuentos allí, en español, en inglés y en xhosa. Bonita idea, ¿no? ¡Por favor, que salga!
También disfrutamos de la comida que prepararon: samosas, bocadillitos y dulces con té.
Las niñas bailaron. Lo hacían muy bien, aunque alguna estaba un poco tímida ante tanta gente mirando...
En nuestro afán por escuchar y compartir cuentos, estamos buscando librerías "interesantes" donde poder ejercer nuestro vicio.
Una de las más bonitas es The Book Lounge. Los sábados por la mañana hacen lecturas de cuentos y disponen de un servicio de cafetería además.
Te sientas en la alfombra y te dejas llevar, como Aladino, a otros mundos jamás imaginados...
Mmm interesante, ¿verdad? También nos gustaría contar aquí.
Y el miércoles de esta semana estuvimos con nuestra amiga y escritora Patricia Schonstein. Tenía una lectura en voz alta en una libreria de Kalk Bay. Un lugar realmente agradable, hace esquina a dos calles y tiene hermosos ventanales desde los que puedes ver el mar.
Después de la lectura de Patricia, otras personas leyeron sus escritos o sus poemas preferidos, y a nosotros nos invitaron, cómo no, a contar un cuento.
Fue hermoso hablar de historias que cobran vida, de ballenas que aparecen cuando menos te lo esperas, del hielo del norte en las tierras del sur.
¡Queremos repetir!
¡Qué pasada! Mi corazoncito de ex bibliotecario se ha conmovido con esta entrada. :-))))
ResponderEliminarUn beso y un abrazo muy grandes para los dos. :-***
Uauuu! Que bé! Segur que podreu explicar contes en aquests llocs i també n'aprendreu.
ResponderEliminar(I d'aquí un any ens els expliqueu a nosaltres je je ;o)
Que vagi molt i molt bé!!!
Petons
Gracias por vuestros comentarios!!
ResponderEliminarEste sabado estuvimos de nuevo en Gugulethu y, de hecho, creo que volveremos mas veces. Ya os iremos contando.
Petons